El cadete femenino del CB Marbella, un equipo que se sobrepone a las dificultades

El conjunto femenino del Club Baloncesto Marbella cuenta con un grupo de diez jugadoras en el que se mezclan "dos generaciones distintas", apunta José Borrego, quien aclara que "tenemos algunas que llevan mucho tiempo jugando y otras que juegan desde principio de temporada, por lo que contamos con un grupo muy heterogéneo y con el que no es fácil entrenar por la diferencia de nivel".

Para poder trabajar de la mejor forma posible con todas las jugadoras "el secreto está en entrenamientos que estén en un término medio para que no se aburran las que están en un nivel superior y que no se desanimen las que entran nuevas". En estas sesiones se compensa el trabajo con ejercicios técnicos básicos y otros más complejos.

El gran hándicap con el que tiene que trabajar este equipo es que solo haya diez jugadoras. Las lesiones o cualquier otro contratiempo merman en exceso a un equipo que por ejemplo el pasado fin de semana tuvo que asistir a un partido con solo seis chicas. "Ahora mismo tenemos cuatro lesionadas y lo ideal sería que nuestro partido no coincidiera con el del infantil para poder subir a jugadoras", detalla Borrego.

En el último encuentro, las bajas hicieron mella en las azulonas que no pudieron contar con ninguna jugadora infantil y que perdió ante un equipo al que en la primera vuelta habían ganado por 37 puntos.

Pese a este tropiezo, el técnico de las cadetes resalta que "si a principio de temporada nos dicen que vamos a estar donde estamos ahora, ni en sueño nos lo creemos". El equipo estaba líder de su grupo hasta el partido del pasado fin de semana y aún depende de sí mismo para meterse en las semifinales del campeonato provincial.

En la primera vuelta, las azulonas se impusieron a domicilio al favorito, CB El Palo. El cadete marbellí tiene por delante tres partidos ante los dos primeros clasificados y otro frente al quinto, "si somos capaces de competir, ganando los tres, nos metemos en semifinales", explica el técnico marbellí, quien aclara que "desde principio de temporada he sido muy realista y nuestro objetivo es meternos en la Copa de la Federación como terceros. Entrar en la Final Four ya sería haber hecho una buena temporada".

Al margen de la competición, en los entrenamientos del cadete femenino se soluciona este déficit de jugadoras mezclándolos con el conjunto sénior femenino. El entrenador del equipo comenta que "lo bueno de esto es que las cadetes están entrenando a un nivel muy alto y están aprovechando para coger experiencia".

Mezclar los dos equipos dificulta a veces el trabajo ya que hay entrenamientos a los que vienen ocho jugadoras y luego hay otros en los que se juntan 20 y "así es complicado planificar un entrenamiento", explica.

Borrego señala que de momento no especializa a sus jugadoras y "si sus características se lo permiten intento que todas jueguen de todo, en la posición que haga falta". Esto sin duda permite formar a jugadoras mucho más completas. Además, el técnico de la entidad azulona destaca que "por supuesto que hay que seguir trabajando en esta categoría la técnica individual, pase, bote, tiro y también algo de temas tácticos".

Carmen Sánchez aporta su tiro exterior al equipo, mientras que María Pérez es todo potencia y Judith López pone el sacrificio. Anta Torres es la regularidad, Marta Sánchez la implicación y Ana Sánchez la garra. Natalia Rivas es una jugadora con enorme potencial que destaca por su salto y es que se engancha al aro. Además Adriana Elcoroiribe aporta muchísimo carácter al equipo, mientras Marta García y Paula Espada trabajan mucho para continuar su formación.