Ya he escrito algunos comentarios sobre la situación del tráfico en esta céntrica vía, Alonso de Bazán, clave para acceder a ciertos puntos o girar al norte de Ricardo Soriano.
Aunque la verdad es que más que el tráfico habría que hablar de la actitud de innumerables conductores, que sólo piensan en ellos mismos cuando estacionan sus coches, taponando con ello accesos a los aparcamientos privados, por no hablar de repartidores de empresas que bien poco les importa dejar sobre la acera, obligando a todos a pasar con excesivo cuidado (cuando se puede…), o bien aguantar el sonido de los cláxones sonando porque un camión no puede atravesar la calle. Eso, antes que pensar en el resto de la ciudadanía… faltaría más.
Lo de la peatonal calle Joaquín Belón, entre los edificios Alfil y RS21, exaspera y desespera a propios y extraños, cuando a cualquier hora, ya sea mañana o tarde, de lunes a viernes, comodones conductores prefieren impedir a usuarios de un aparcamiento su acceso o salida, mientras ellos adquieren sus compras en cualquier comercio de la zona o llevan a cabo gestiones bancarias, notariales o registrales. Se ha convertido, igualmente, en una habitual zona de carga y descarga. Los repartidores han establecido en acotada para ellos usando las aceras y la ausencia de requeridos bolardos. Incluso es extraño el día en que una conocida pastelería no estaciona sus vehículos de reparto allí.
Como siempre, una imagen vale mucho más que mil palabras…
Me pregunto, una vez más, si desde instancias administrativas no se va a hacer nada. Porque, claro está, desde las policiales, en alguna ocasión (aislada) si ha podido verse actuar, aunque mínimamente. ¿Tanto cuesta tomar unas medidas más allá que una simple señal de tráfico que, visto lo visto, se la pasan por el arco del triunfo? ¿Tienen los ciudadanos que soportar, continuamente, que el egoísmo ciudadano? ¿Es mejor entorpecer el tráfico, impedir el acceso/salida legítimo de vehículos, que abonar treinta céntimos de euro en la Zona Azul? ¿Se puede tener un coche de alta gama pero no se tiene unas monedas para dejarlo bien estacionado?
Y ya no es cuestión sólo de particulares o repartidores de empresas privadas, es que una sociedad estatal como Correos y Telégrafos tambien se permite el lujo de dejar la furgoneta en el estado en que, nuevamente, se puede apreciar en la imagen ilustrativa.
Vuelvo a insistir en algo que llevo diciendo tiempo: una calle como Alonso de Bazán debe quedar siempre libre y expedita, con suficiente paso para camiones que circulan por la misma y que no pueden, material y físicamente, pasar porque a alguien le ha dado la real de las ganas, dejar su coche encima de la acera.
Solidaridad ciudadana no es sólo ayudar a nobles causas, es tambien no fastidiar a vecinos que sólo pretenden circular por la calle sin sobresaltos. Y el cumplimiento de las normas de tráfico es una forma de hacerlo.
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