Irregular es el adjetivo que mejor califica la primera vuelta que han protagonizado Marbella FC en el estreno de la nueva categoría 3ª RFEF -sucesora de la antigua Tercera División-.
El Marbella FC ha concluido esta primera vuelta en 7ª posición con 24 puntos, a la espera de que se resuelva la reclamación por la alineación indebida que cometió el Alhaurín de la Torre en el último encuentro.
Sea séptimo con 24 puntos o quinto, y en puesto de playoff, con 26 puntos; lo cierto es que el conjunto marbellí se encuentra muy lejos del objetivo marcado esta temporada: Ser campeón de grupo para lograr el ascenso directo.
El Motril lidera la clasificación con 31 puntos y en caso de que el Juventud de Torremolinos ganara su partido aplazado, la distancia entre Marbella y el conjunto blanquiverde se iría hasta los siete o nueve puntos -en función de la resolución a su reclamación-.
El conjunto blanquillo ha demostrado ser muy irregular esta temporada, capaz de encadenar tres derrotas consecutivos y de permanecer cuatro partidos con la portería a cero. El equipo nunca ha terminado de mostrarse cómodo ni con una idea clra de juego.
Los de Abraham García sólo han anotado 16 goles a favor, siendo el undécimo equipo del grupo en esta estadística, pero sí han sido capaces de encajar sólo 12 tantos en contra, sólo por detrás del Juventud de Torremolinos que ha recibido 11.
Además, el Marbella ha demostrado que rinde mejor cuando juega fuera de casa y no tiene que llevar la iniciativa. A domicilio ha sumado 14 puntos y es el tercer mejor visitante del grupo; mientras que en casa ha tenido más problemas para sumar los 10 puntos que luce en su casillero siendo el 12º local en una clasificación con sólo los equipos jugando en casa.
De esta manera, aún hay margen para la reacción, pero el conjunto blanquillo deberá mejorar mucho en la segunda vuelta si quiere tener alguna opción de pelear por el liderato.