Este viernes se cumplen cuatro años del triunfo ante La Balona que permitió jugar el ascenso a Segunda

El 10 de mayo de 2009 fue un día histórico para la entidad. El conjunto marbellí había atravesado una temporada realmente complicada. Los problemas extradeportivas y que mantuvieron al equipo con continuos retrasos en el cobro de las nóminas durante la campaña, unieron a un grupo de jugadores que se creyeron que podían ascender a Segunda División.

La temporada había sido extraña y el equipo tuvo varios momentos en los que parecía que no seguiría en la competición debido a la falta de liquidez de la entidad. Sin embargo, estos problemas consiguieron una unión en el vestuario en la que jugadores como Dani Sánchez, Alejandro Ávila, Carlos Rivera o Carlos Arias tuvieron mucho que ver para que el conjunto pudiera seguir centrado en el fútbol.

También fue clave la aportación del técnico José Luis Montes que se quedó al lado de sus jugadores y supo transformar esa preocupación y rabia por no cobrar en un equipo con un hambre especial y distinto por hacer las cosas bien y demostrar que, con ellos, se estaban equivocando.

Aquel 10 d emayo de hace cuatro años el Marbella ganó por 0-1, con gol de Carlos Rivera de penalti, a la Balompédica Linense y conseguía así el cuarto puesto del Grupo IV de Segunda División B y, por tanto, se ganaba el derecho a soñar con Segunda A.

Después de aquella victoria que se celebró como pocas en el Estadio de La Balona ante unos 200 aficionados marbellíes que se desplazaron hasta La Línea, el equipo no fue capaz de superar el primer partido de la fase de ascenso. Los de Montes jugaron ante un Lorca que fue mejor en Marbella pero que tuvo mucha suerte en el partido de vuelta jugado en tierras murcianas.

De aquel mítico equipo que jugó la temporada 2008/2009 solo un jugador continúa en la disciplina blanquilla. Además, otros 10 ya están retirados y otros 13 jugadores aún están en activo. El jugador que sigue perteneciendo a la Unión Deportiva Marbella es el capitán José Trujillo, que en aquella temporada era el banjamín del grupo y daba sus primeros pasos en el fútbol sénior.

En activo aún hay varios futbolistas, la mayoría de ellos en Tercera División, mientras que jugadores importantes de aquel conjunto como Dani, Ávila, Christian o José Mari decidieron colgar las botas.

A continuación os dejamos la trayectoria de los jugadores de aquella plantilla tras abandonar el equipo:

	Alejandro Ávila: Uno de los capitanes y hombre fuerte del vestuario jugó dos campañas más. La siguiente en el Marbella y otra más en el Estepona, también en Segunda B. Después de aquella campaña decidió colgar los guantes.
	Carlos Rivera: El capitán y mediocentro con una clase espectacular que marcó el gol decisivo en La Línea. Siguió un año más vinculado al Marbella para marcharse luego al Caravaca de Segunda B. Actualmente sigue jugando en el Mar Menor.
	Nico Chietino: El argentino fue un hombre importantísimo en el centro del campo del conjunto marbellí. Siguió una temporada más en el Marbella para regresar a Argentina desde donde volvió para jugar en el Villanovense en Segunda B y el Burgos en Tercera, donde sigue.
	Pedro Muñoz: Uno de los jugadores con más proyección del equipo y máximo goleador del mismo aquella temporada. También renovó una campaña más con el Marbella para luego fichar por el Estepona, Cacereño y Algeciras, donde juega actualmente en Tercera.
	Carlos Arias: Central eterno del fútbol local. Otra temporada en el Marbella, Estepona, regreso a Marbella y San Pedro, donde ha jugado esta campaña a un gran nivel.
	Christian Leroy: Probablemente el mejor jugador de aquel Marbella. Incluso equipos de Segunda A le tenían echado el ojo, pero una grave lesión en la pretemporada siguiente acabó prácticamente con su carrera. Después del descenso pasó por Alhaurín de la Torre y Estepona sin demasiada fortuna. Esta misma campaña inició la pretemporada con el Fuengirola-Los Boliches pero finalmente decidió retirarse.
	Ignacio Pérez "Igna": El pulmón del equipo. Carrilero infatigable que jugó dos buenos años en el club marbellí. También el descenso le llevó fuera de la entidad. Estepona, Fuenlabra y El Palo han sido sus equipos. Actualmente sigue jugando en el conjunto paleño.
	Santi Moreno: Otro de los jugadores de más calidad del equipo y que dejó grandes momentos aquel año. Después de seguir en el equipo la temporada del descenso se marchó y ha jugado en Alhaurín, Fuengirola, San Pedro y Estepona, donde aún juega.
	Juan Francisco Góngora: Fue una de las grandes sorpresa de la temporada. Se consolidó en la banda izquierda del equipo y ofreció un altísimo rendimiento. Tras aquel año prefirió marcharse a Murcia, donde jugó en el conjunto filial y en el primer equipo durante dos campañas. El año pasado estuvo en el Cádiz y ahora juega en La Roda, siempre en Segunda B.
	Pedro Alcalá: Este fuerte central fue la revelación de la temporada, llegando a ir convocado con las categorías inferiores de la selección española y siendo finalista de los Premios Draft a los jugadores con más proyección. Alcalá, que estaba cedido por el Málaga, regresó a la entidad blanquiazul que lo cedió al Real Unión de Irún de Segunda A. Después pasó por los filiales de Getafe y Almería, donde sigue jugando.
	Francisco Javier Zamorano: El lateral y central madrileño regresó la temporada siguiente a Melilla para retirarse del fútbol al acabar la pasada temporada.
	David Rives: El central castellonense también continuó la temporada siguiente en el equipo para jugar después en el Cacereño donde volvió a dirigirle José Luis Montes. Lleva dos temporadas sin jugar al fútbol.
	José María García: El centrocampista fue un jugador importante en los partidos de final de temporada. José Mari, que había debutado en Primera División con el Espanyol, se retiró del fútbol al acabar la temporada.
	Jesús María "Chus" López: Jugador de mucha clase y un gran golpeo de balón que renovó con el Marbella una temporada más. La campaña del descenso se retiró del fútbol en mitad de año y regresó a su Asturias natal.
	Daniel Sánchez-Biedma: El eterno siete del Marbella tuvo menos participación con Montes pero aún así fue imprescindible para mantener la unión del vestuario. Siguió dos temporadas más en el Marbella. Se retiró tras jugar la primera del equipo en Tercera.
	Francisco Javier Gámez "Curro": Llegó al equipo en el mercado de invierno tras la marcha de algunos jugadores. Fue utilizado como hombre de refresco por Montes y recordado por sus largos saques de banda al área rival. Regresó al Alhaurín donde jugó un año más.
	Juan Ríos: El lateral marbellí contó poco para Montes en aquella temporada y al término de la misma se buscó destino. Jugó en Los Barrios, Estepona y desde hace dos temporadas es jugador del San Pedro.
	Tommy Mooney: Llegó con la vítola de haber jugado en Premier League. Sin embargo nunca entró en la dinámica de grupo y antes de Navidad ya había abandonado el equipo. No hizo ni un gol. Se retiró tras abandonar el Marbella.
	José Trujillo: Único superviviente de aquel equipo. El canterano ha seguido ligado al club y asumiendo galones hasta convertirse actualmente en el capitán de la Unión Deportiva Marbella.
	José Manuel Freijo: Central que también abandonó pronto el "barco" tras los problemas económicos del club. No volvió a jugar tras dejar el Marbella.
	David Pino: Uno de los jóvenes que más apuntaban de aquel equipo pero que nunca pudo tener continuidad por las lesiones. Marcó un gol con el Marbella, el único del equipo en la fase de ascenso a Segunda A. Abandonó el equipo tras aquella campaña y desde entonces ha pasado por Arroyo CP, Vélez, Roquetas, Sporting Villanueva, Formentera y Hellín Deportivo, su equipo actual.
	Rafael Carrasco "Rafa Boga": Jugador de la cantera marbellí que disputó un solo partido con el equipo. Después de acabar la temporada ha jugado en el San Pedro, Atlético Marbellí, Estepona y Atlético Marbella, donde juega aún.
	Álvaro Olmo: Otro de los canteranos de aquella plantilla que solo pudo jugar cinco minutos. Tras aquella campaña se marchó cedido al San Pedro, que le acabó firmando a la siguiente temporada. Es uno de los jugadores clave del conjunto rojinegro.
	José Luis Montes: El entrenador artífice de aquel milagro. El segoviano se mantuvo en el equipo, pese a los problemas económicos, y consiguió la gesta de meterle en fase de ascenso. La siguiente campaña también disputó los octavos de final de la Copa del Rey ante el Atlético de Madrid, aunque fue despedido antes de acabar una temporada que terminó con el equipo en Tercera División.