El portavoz del PSOE en el Ayuntamiento, José Bernal, ha realizado esta mañana balance del año 2012, que ha considerado ha sido el de los "grandes proyectos que han dejado paso a las grandes mentiras", lo que ha permitido "visualizar el engaño del PP a los vecinos". Según explicó, ha estado marcado por el "despilfarro, el caos y las promesas incumplidas" y ha tenido como cierre "la amenaza de un ERE" a los trabajadores.
El líder socialista ha realizado un amplio repaso por los aspectos más destacados que deja la política municipal en el año que acaba de concluir y ha hablado de subidas de impuestos, despilfarro, falta de transparencia, protestas de los trabajadores, gastos innecesarios, opacidad y promesas incumplidas, entre otros aspectos.
Bernal inició su repaso recordando la "brutal" subida de impuestos que se produjo en el mes de enero, principalmente en el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI),que llegará al 300% en los próximos ocho años, y que señaló se hizo "de espaldas a los ciudadanos y a los grupos de la oposición". Además, insistió en que esta subida se justificó con el fin de pagar la deuda del Ayuntamiento pero "han cobrado los impuestos y no han pagado nada".
Recordó la creación de la tasa de saneamiento, que supuso un ingreso de 7 millones de euros para el Ayuntamiento a cambio de que Aquagest "cobrase ese impuesto durante 25 años". También habló de la subida del agua, con la "tarifa más alta en la historia de Marbella en un momento de crisis".
Un capítulo al que dedicó especial atención fue el de los sueldos politicos en el Ayuntamiento y explicó que durante este año habían detectado que se destinaban 3,2 millones de euros para cargos de confianza y concejales electos y no electos. "Este despilfarro no se puede sostener con más de 60 cargos de confianza, desoyendo las recomendaciones de la FAMP, más aún cuando ahora se habla del despido de trabajadores", explicó.
"Desde que el PP está en el equipo de Gobierno, la deuda del Ayuntamiento ha crecido en 100 millones de euros", añadió Bernal.
También señaló que durante este año habían reclamado a la alcaldesa la misma insistencia con el nuevo Gobierno del PP en Madrid que tenía antes con el de Zapatero. "No lo hizo y además se dio la circunstancia, que ahora se ha vuelto a producir, de que por primera ver los PGE no aportan ni un solo euro en inversión para Marbella", añadió.
Conflictos sociales
José Bernal recordó las protestas de trabajadores, que comenzaron con los de los Oales contra "los recortes y la privatización de servicios". "Es una hipocresía y un doble rasero plantear que sobran empleados mientras su labor se entrega a empresas privadas". Después continuaron con los policías locales y los trabajadores de limpieza, "dos de los baluartes de cualquier ciudad turística", y con lo que no hubo diálogo.
Los conflictos sociales tuvieron su punto álgido en agosto con la "manifestación más importante que se recuerda en Marbella en muchos años contra los recortes y el despilfarro, con 12.000 personas en la calle que solo obtuvieron el silencio del PP".
El líder socialista reclamó que en plena crisis se ejecuten las infracciones urbanísticas que están sin cobrar y recordó los 18 millones de multa que se impusieron al Centro Comercial La Cañada por su ampliación "y que seguimos sin saber por qué no se han exigido a la empresa".
Bernal criticó "gastos innecesarios" como los nuevos equipos por valor de 225.000 euros para Radio Televisión Marbella, un medio "en el que no aparece la oposición", o el decreto para comprar un coche nuevo a la alcaldess, del que al final se dio marcha atrás "por la presión de los ciudadanos y del PSOE". También censuró la contratación de una asesoría jurídica externa, por más de un millón de euros, que "solo ha servido para ir contra los derechos de los trabajadores".
Déficit en 2011
En materia presupuestaria señaló que, después de varios años de superávit, "firmados por un interventor con seis causas abiertas de la época Gil, tras su jubilación ha aparecido un déficit de 19 millones de euros", algo que consideró muy grave porque ahora propiciará un plan de ajuste contra los trabajadores.
Por todo ello, el portavoz socialista dijo que habían solicitado la fiscalización de las cuentas del Ayuntamiento, a lo que "se opuso el PP por primera vez en la historia del Parlamento Andaluz pese a que van dando lecciones de transparencia".
En su exposición recordó también la "opacidad urbanística" con el cargo de confianza más importante de Urbanismo, Federico Guardabrazo, "imputado por tener una oficina privada" y el varapalo de la sentencia judicial que ha anulado todos los acuerdos de la mesa de negociación en más de un año por no haberse contado con todos los sindicatos. En materia judicial también señaló la imputación del teniente de alcalde, Félix Romero, por el caso de UNA TV.
En cuanto a proyectos incumplidos, citó la residencia del Trapiche, las piscinas, el pabellón de Bello Horizonte, etc, y, sobre todo, el "gran fiasco" del puerto de La Bajadilla, que la alcaldesa utilizó como "mentira para conseguir potencialmente votos prometiendo puestos de trabajo que nunca existieron".
Como punto final, recordó la amenaza del ERE que pende sobre los trabajadores municipales. "Tendrán que explicar a la gente cómo van a despedir a trabajadores mientras contratan a otros por la puerta de atrás", señaló Bernal, quien añadió que "los sindicatos han denunciado que durante estos cinco años se han realizado más de 500 contrataciones sin oferta pública". "Marbella es el único municipio con mayoría absoluta que está todavía sin presupuestos", concluyó Bernal.
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