Desde el equipo de gobierno que lidera Ángeles Muñoz han informado este martes de los
nuevos aportes de arena en las playas de La Fontanilla y La Venus-Bajadilla dentro de los trabajos para regenerar las zonas más afectadas por los temporales.
Son actuaciones, según se ha explicado, que se van a prolongar hasta las primeras semanas de julio.
En ellas, se está empleando la
misma arena que en San Pedro Alcántara, Río Verde-Ancón y El Pinillo, procedente del entorno de El Alicate.
Según el gobierno local, tiene una calidad que ha sido certificada por Costas y cuyo color, que ahora es
más rojizo de lo normal, será el mismo que la del resto una vez se integre por completo.
Ya antes de Semana Santa se esparció este tipo de arena en las
playas de Marbella como la de la Fontanilla, pero las lluvias de esa época la hicieron pasar más inadvertida.
En cambio, hace unas semanas se echó también en
San Pedro Alcántara y ha generado una gran contestación social, incluso con una manifestación este pasado lunes en la plaza de la Iglesia.
El color rojizo es muy llamativo y
genera rechazo en buena parte de la ciudadanía, además también porque este tipo de arena mancha bastante.
Desde el Ayuntamiento, en su línea habitual, han aprovechado para descargar un poco la polémica en la Demarcación de Costas.
Este organismo, según la Delegación de Playas, había dado las pautas a seguir para evaluar la calidad de la arena rojiza mediante
tres analíticas: una granulométrica, una química y otra biológica.
El Ayuntamiento define como "un proceso natural" que el agua se enturbie los primeros días tras la finalización de los trabajos, y aseguran que en cuestión de unas 48 horas volverá a su estado natural.
Ha añadido que “en este caso el efecto visual es más escandaloso porque los ciudadanos no estamos acostumbrados a ver esa mancha roja en la playa, pero obedece a la dilución de finos en el mar”.
Noticia relacionada:
- Empresarios de San Pedro muestran su malestar por la arena roja en las playas