La peatonalización afectará a los 600 metros lineales comprendidos entre la calle del Calvario, por el oeste, y la calle Félix Rodríguez de la Fuente, por el este. En total, las obras se realizarán sobre 20.000 metros cuadrados y la nueva calzada tendrá un ancho de 25 metros. También se remodelarán algunas zonas aledañas, como por ejemplo la calle Miguel Cano.
El proyecto ha sido presentado esta mañana tras la Junta de Gobierno Local en la que se ha aprobado el pliego de condiciones para el concurso público mediante el cual se adjudicará el estudio de viabilidad de la obra, con un coste de 50.000 euros más IVA, que servirá como base para el posterior desarrollo de la peatonalización. Junto a la alcaldesa, Ángeles Muñoz, han comparecido el concejal de Tráfico y Movilidad, Félix Romero, y el de Obras, Javier García.
"Antes de dar este paso, nuestros servicios técnicos ya han visto que la obra es posible y además necesaria, creemos que tiene una gran proyección para la ciudad", señaló la alcaldesa, quien explicó que el plazo de presentación de propuestas para el estudio de viabilidad concluirá en noviembre y que para febrero de 2013 esperan tener las conclusiones de la empresa adjudicataria.
Respecto al comienzo de los trabajos de peatonalización, Ángeles Muñoz señaló que las fechas se conocerán una vez se tenga el estudio que hoy se ha encargado y se proceda posteriormente a licitar la obra. De todas formas, explicó que "no lo haremos en verano, lo más probable es que sea después". El plazo de ejecución, según dijo, sería de "un año porque lo haremos con las empresas más potentes que nos lo garanticen".
La alcaldesa ha señalado también que ya durante los meses de junio, julio y agosto se ha llevado a cabo un estudio previo por parte de los operarios municipales para conocer detalles como la intensidad del tráfico, los puntos semafóricos, el transporte público, los aparcamientos y las zonas de carga y descarga, entre otros aspectos.
"Estamos ante un proyecto ambicioso, de legislatura, que supone un gran esfuerzo pero creemos que este tipo de actuaciones son necesarios para revitalizar el ámbito económico y la situación turística de la ciudad", dijo Muñoz.
Además del estudio de viabilidad en el plano de la ingeniería, hoy también se ha encargado otro de asesoramiento técnico dentro del ámbito arquitectónico y de diseño del proyecto, con un coste de 18.000 euros más IVA. "Espero que se sumen muchos arquitectos locales y nos ofrezcan sus propuestas", señaló la alcaldesa.
La peatonalización de los 600 metros de las avenidas Ricardo Soriano y Ramón y Cajal conllevará una reorganización del tráfico en el centro de la ciudad y, por ejemplo, los vehículos tendrán que salir dirección Málaga por la circunvalación, o entrar hacia la zona del Francisco Norte por la calle del Fuerte y el túnel y luego por la Avenida Antonio Belón. También supondrá la creación de una importante zona comercial y de paseo.
"Nos servirá para conectar dos partes muy dinámicas como el Paseo Marítimo y el Casco Antiguo, queremos crear una gran espacio céntrico económicamente potente en Marbella", añadió la alcaldesa, quien señaló que estamos ante una zona más importante que la calle Larios de Málaga. "Será mucho más, porque aquí estamos hablando de 600 metros con 25 de ancho de calzada y algunas calles aledañas", explicó.
Ángeles Muñoz y Javier García, ante el plano del proyecto.