Por segunda vez en muy pocos días, José Eduardo Díaz aparece vinculado a un asunto turbio, que se añade otro más antiguo, el de las presuntas facturas falsas con las que habría pagado publicidad a un medio de comunicación.
El pasado sábado apareció relacionado
con el ex comisario Villarejo al regularizarle en 2014 un lavadero de coches en el aparcamiento de la calle Jacinto Benavente de Marbella.
Ahora, está en una
conversación telefónica grabada por la Policía con el presunto narcotraficante
Joakim Broberg, que en ese momento estaba siendo investigado por narcotráfico y blanqueo.
El hijastro de la alcaldesa le llama porque tiene un cliente para un local del Ayuntamiento, pero José Eduardo le dice que él ya no se ocupa de esos temas, que ahora está en
Seguridad Ciudadana.
Ahí Joakim aprovecha y le dice: "me cuidas, ¿no?", y el concejal le responde: "eso siempre, cuenta con ello" y cierra enviándole "un abrazo".
La conversación, incluida en el
sumario de la trama sueca instruido en la Audiencia Nacional, muestra la facilidad con la que Joakim tenía acceso a este concejal, al que
llama a su móvil mientras está con su familia.
El hijastro de la alcaldesa intenta que le ayude en un tema de un local, pero José Eduardo le dice que
ya no se ocupa de esa delegación (Industria y Vía Pública), que había llevado hasta 2015.
Hay que recordar la
proximidad de Joakim Broberg a miembros de la
Policía Local, según consta en los informes policiales, incluso uno de ellos, que fue escolta de su madrastra, está procesado por cohecho.
El audio se ha conocido gracias a una investigación conjunta entre
elDiario.es y La Sexta.
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