La visita que realizó el director de la
Agencia Pública de Puertos de Andalucía (APPA) el pasado viernes a Marbella ha sido muy esclarecedora, por fin, sobre lo que está pasando con La Bajadilla.
Rafael Merino no dejó lugar a dudas. No habrá ampliación, algo que ya se veía venir, ni asumiéndola la Junta, ni tampoco con otro concurso público.
Por un lado,
descartó con rotundidad afrontar las obras
con fondos propios, algo que la alcaldesa, Ángeles Muñoz, le pedía al Gobierno socialista para llevar a cabo el proyecto, vital para reactivar la economía el municipio, decía.
Solo hay que ir a la
hemeroteca. El
7 de abril de 2008, en su primera iniciativa como
parlamentaria andaluza, Muñoz reclamó a la Junta que ejecutara "de forma inmediata" las obras.
"Es una
urgencia y una necesidad porque lleva muchos años parado", declaraba entonces la casi también recién estrenada alcaldesa. "Es un clamor de todo el sector y de toda la ciudad en general", añadía.
El presupuesto era de
80 millones de euros y permitiría duplicar el número de atraques, habilitando el recinto para cruceros de mediano tamaño, explicaba Muñoz entonces.
Doce años después, con su partido en la Junta, el discurso ahora es otro. "No tenemos capacidad financiera para asumir una ampliación de esta magnitud, es imposible”, dijo
el pasado viernes el director de la APPA con la alcaldesa al lado.
Y hasta
descartó hacer un
nuevo concurso público. "Habría que estudiarlo con detenimiento", señaló, para después aclarar que el puerto está en "condiciones buenas".
Es decir, no hay ninguna intención de sacar adelante el proyecto, pese a que
Ángeles Muñoz facilitó en su día que
un jeque árabe ganara la licitación que finalmente puso en marcha la Junta en 2010.
Atrás queda la época en la que
se hacía fotos con Al-Thani y, a solo unos días de las
elecciones municipales de 2011, presumía de facilitar la creación de "miles y miles de puestos de trabajo".
No era solo la ampliación del puerto, sino también
un hotel de lujo, zona comercial con las "mejores marcas" y hasta una auditorio al lado, vendía en plena campaña electoral.
Y hasta
pedía urgencia: "cuanto antes empiecen las actuaciones, mucho mejor para la ciudad", decía.
Ahora, con su partido al frente de la Junta, todo olvidado, ya no hay prisa ninguna ni es un proyecto estratégico para el municipio.
Y es que Merino hasta criticó el pasado viernes los "
macroproyectos que el PSOE permitió", una afirmación que, o hizo desde la mala fe para engañar, o desde el más profundo desconocimiento de todas estas declaraciones que hemos recordado de Ángeles Muñoz.
No, la Bajadilla no fue solo un proyecto del PSOE, lo pidió Ángeles Muñoz y hasta la apoyaron los empresarios del
Centro de Iniciativas Turísticas (CIT).
La Junta solo buscó la forma, a través de una concesión en plena crisis, y obviamente se equivocó al elegir al jeque, que era el candidato de la alcaldesa.
Pero es que, además, el director de la APPA rechazó
proyectos faraónicos en Marbella, olvidando que la regidora asistió el
pasado 24 de julio a la presentación del
nuevo estadio de fútbol, que puede costar, más o menos, lo mismo que la ampliación de La Bajadilla y se va a adjudicar a dedo.
En definitiva, fue un auténtico
disparate de rueda de prensa, convocada solo unas horas antes, y en la que quedó claro que el PP, ahora, no quiere la ampliación que reclamó insistentemente desde 2008.
Hasta han buscado la coartada de la
Cofradía de Pescadores, cuyo patrón mayor, Manuel Haro, dejó claro que no quiere que se lleve a cabo aquel proyecto que, en su día, según Muñoz, apoyaban todos los colectivos de la ciudad.
Por tanto, solo parece cuestión de tiempo que el PP liquide, ahora que gobierna, su propia reclamación para La Bajadilla. Solo queda un resquicio, que la
UTE Marina Internacional de Marbella, que perdió en su día el concurso ante el jeque, pueda asumir las obras.
Pero, por las declaraciones de Merino, resulta bastante evidente que le van a poner a todo tipo de trabas.
Es conocido que a Muñoz nunca le gustó este proyecto, en el que está el Grupo Alfil, así que por el momento ya le han pedido que presente dos informes.
Fácil no lo van a tener, si es que todavía quieren hacer la ampliación, que parece que sí, pero no olvidemos que fue este consorcio temporal el que tumbó en los juzgados, en defensa de sus derechos,
la concesión a Al-Thani y originó la situación actual.
Queda esa opción, pero la impresión ahora mismo es que el proyecto está liquidado por quienes lo crearon.
Noticia relacionada:
- La Junta le pasa la pelota de La Bajadilla a la UTE perdedora en 2011
-