El Grupo Socialista en el Parlamento Andaluz ha informado hoy del acuerdo alcanzado tras la propuesta que realizó el pasado 4 de octubre para que se fiscalicen las cuentas del Ayuntamiento marbellí desde 2007, durante la etapa del gobierno del Partido Popular.
Esta medida, según han aclarado, se llevará a cabo sin ninguna tramitación, por lo que no hace falta debate previo ni el paso por ninguna comisión, ya que cada grupo político tiene la potestad de solicitar que se revisen las cuentas de una administración, a lo que accede el Parlamento andaluz sin más requisitos. En este caso, los socialistas andaluces han pedido que sea investigado el Ayuntamiento de Marbella por las "serias dudas" que mantienen sobre la gestión económica municipal.
Desde el PSOE también han puesto de manifiesto que la fiscalización integral del Ayuntamiento de Marbella es una investigación meticulosa y profunda, que no tiene nada que ver con la supervisión rutinaria que lleva a cabo la Cámara de Cuentas anualmente, y con fines estadísticos, de todos las entidades locales superiores a 50.000 habitantes.
Entre los asuntos que se han destacado para tomar esta iniciativa por parte del Grupo Socialista, según ha señalado el parlamentario José Bernal, es que los sindicatos han denunciado la incorporación de 500 personas a la plantilla municipal “sin proceso de selección”, lo que ha provocado denuncias tanto por parte de las fuerzas sindicales, como a título individual.
Al mismo tiempo, a finales del mes de mayo de 2012, según reconocieron la propia alcaldesa, Ángeles Muñoz, y el coordinador de Hacienda Carlos Rubio, existía una desviación presupuestaria de 13 millones de euros, es decir, que “existen serias dudas de que los presupuestos, o bien estuviesen mal elaborados, o que los gastos se habían multiplicado sin justificación aparente”, señaló Bernal, quien recordó además que esta desviación es “cuanto menos sospechosa” debido a que el Ayuntamiento incrementó de forma considerable la recaudación vía impuestos a los ciudadanos de Marbella y San Pedro.
El parlamentario andaluz ha recordado además que la fiscalización de la Cámara de Cuentas permitirá aclarar dónde fueron a parar los 14 millones de euros que el Ayuntamiento presupuestó para hacer frente al pago de la deuda con la Junta de Andalucía, y que nunca han llegado a pagarse porque no existe liquidez. Sin embargo, ahondó en que el reintegro de esta cantidad “estaba presupuestado y aprobado en el pleno municipal”.
Entre otros asuntos, la Cámara de Cuentas también investigará la política de opacidad de las sociedades municipales, de cuyas cuentas no existe información accesible para los grupos de la oposición en el Ayuntamiento de Marbella, y por tanto, para ningún órgano externo.
Al mismo tiempo, el Parlamento andaluz también ha tenido en cuenta que esta misma semana se ha conocido que el Tribunal de Cuentas ha detectado una supuesta ralentización en las obras financiadas con el Plan Zapatero, lo que podría traducirse en una gestión irregular de fondos públicos.
Externalizaciones
Por otra parte, según ha señalado Bernal, la política de externalizaciones que ha llevado a cabo el Ayuntamiento cuando los sucesivos planes de estabilización financiera recomendaban racionalizar los gastos, también han provocado esta fiscalización integral.
Bernal señaló además que Marbella es uno de los municipios andaluces que más sociedades municipales tiene de toda Andalucía, entidades dijo “en las que la oposición no tiene un papel de fiscalización porque no se nos permite”.
La política de contrataciones de cargos de alta dirección y los elevados sueldos de los cargos de confianza son otros apartados que también serán fiscalizados de forma exhaustiva por parte de la Cámara de Cuentas; así como las partidas que se han presupuestado en sucesivos ejercicios y que nunca han llegado a ponerse en marcha, como por ejemplo la residencia de ancianos del Trapiche.
Por otro lado, también ha declarado que la sospecha sobre las cuentas del Ayuntamiento “nos ha llegado de los propios informes internos del Ayuntamiento”, ya que hoy mismo se ha conocido un informe elaborado por el interventor en el que textualmente dice que “la unidad institucional que forman el Ayuntamiento de Marbella, sus organismos autónomos y las sociedades municipales no productoras de mercado, incumple el objetivo de estabilidad presupuestaria”.
En otro orden de cosas, Bernal recordó que desde el PSOE local “siempre hemos mantenido serias dudas en relación a la elaboración de las cuentas por parte del equipo de Gobierno del Partido Popular en este Ayuntamiento, y de ahí que exigiésemos ya en la pasada legislatura que órganos superiores, ajenos al propio Consistorio fiscalizasen las cuentas municipales”.
“Entendemos que el cálculo de los deudores de dudoso cobro no se ha realizado de acuerdo con lo establecido en las Bases de Ejecución del Presupuesto, que considera como ingresos de difícil recaudación aquellos que tengan una antigüedad superior a cinco años. El Ayuntamiento de Marbella no se atiene a esta premisa, aplicando un criterio que no se sustenta en ningún fundamento legal”, manifestó.
Esta práctica ha sido habitual en ejercicios anteriores e incluso ha sido objeto de estudio en el Informe de Fiscalización del Ayuntamiento de Marbella y Sociedades Municipales Participadas, entre enero de 2002 a abril de 2006, que el pleno del Tribunal de Cuentas acordó realizar. Según este informe, las cuentas del Ayuntamiento en este periodo no reflejan correctamente la situación financiera del Ayuntamiento debido a las deficiencias de formulación.
Personal
Por otro lado, también se ha destacado el hecho de que la partida de personal se haya incrementado de 9,8 millones en 2010 a 11 millones de euros en 2012, cuando supuestamente se ha realizado una reducción de personal debido a las jubilaciones.
Según ha señalado el también portavoz del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Marbella, José Bernal, “nuestra intención es “arrojar luz” sobre una gestión de las cuentas públicas que como mínimo “consideramos opaca”.
“No podemos entender que cuando ni siquiera habían pasado seis meses desde el inicio del actual ejercicio presupuestario existiese ya una desviación de 13 millones de euros en las cuentas públicas”, señaló Bernal, y añadió que a partir de ahora “tendremos ocasión de conocer la situación financiera real del Ayuntamiento, ya que Ángeles Muñoz no podrá negarse a facilitar la información a los hombres de negro, como nos la ha negado a nosotros”.
Sin embargo, quiso aclarar que será la gestión de la alcaldesa y no otra cosa la que provoca que “los inspectores entren en el Ayuntamiento”, y añadió que afortunadamente a partir de ahora “tendemos conocimiento de hasta el último gasto que ha hecho el Consistorio, lo que consideramos además un ejercicio de transparencia”.
Establecer como página de inicio
Añadir a favoritos
