El histórico Convento de la Trinidad de Marbella amenaza con
venirse abajo y sus muros exteriores han tenido que ser apuntalados desde hace unos días en la calle Viento.
En teoría, se supone que las vigas de contención que se ha colocado son para mejorar la seguridad, pero lo cierto es que
el peligro para los transeúntes continúa.
Y es que la calle no se ha cerrado por la entrada desde la iglesia de la Encarnación, por donde se permite el acceso y, al llegar al apuntalamiento, la gente atraviesa bajo las vigas.
Por el otro extremo sí está cortado con una cinta el paso desde la calle Salinas, pero no al contrario, creando un verdadero peligro además estos días con
procesiones en la zona.
Además, entre el apuntalamiento está la entrada a dos viviendas en esa calle. Todo un despropósito por la dejadez con este edificio emblemático.
El Convento de la Trinidad de Marbella, desde la esquina con la calle Salinas.
Y es que Ángeles Muñoz, que lleva 16 años al frente del Ayuntamiento,
empezó en 2008 a prometer que se iba a recuperar este convento, aunque nada ha hecho desde entonces.
Apenas un año después de llegar a la alcaldía, informó de que, tras años de abandono, se iba a
salvar de la ruina este inmueble, que data del siglo XVI, con la idea de convertirlo en un
espacio cultural.
Por entonces, según dijeron, ya se estaba redactando el proyecto al considerar que había cierta premura para evitar un mayor deterioro del edificio.
De ahí pasamos a
abril de 2013, cuando se anunció que el Convento de la Trinidad, que sequía igual que siempre, era el lugar elegido para albergar el
Museo de Arquitectura y Diseño Moderno (MAD), tras descartarse Málaga.
La idea llegó desde
un empresario llamado Íñigo Armengod, director de una promotora, y fue presentado junto a la propia alcaldesa.
Hasta
se firmó un convenio ante los medios y se dijo que el museo iba a ser "pionero" en España. Iba a estar abierto en
tres años, pero nunca se hizo.
Proyecto de restauración
Cinco años después, en
mayo de 2018, Ángeles Muñoz, en otra rueda de prensa, que se había aprobado el proyecto básico de
restauración y rehabilitación del claustro y capilla del antiguo Convento de la Trinidad.
La inversión prevista era de 1,8 millones de euros e iba a suponer "un
revulsivo cultural para el Casco Antiguo" de Marbella sumándose a "centros de referencia" como el Museo del Grabado y el Hospital Real de la Misericordia, dijo la regidora.
Nada se hizo, mientras el edificio continuaba deteriorándose aún más.
El
16 de octubre de 2020, visitó Marbella la entonces consejera de Cultura de la Junta,
Patricia del Pozo, que habló de todo tipo de inversiones en el municipio que nunca se han producido.
Entre ellas, se volvió a hablar del Convento de la Trinidad, una vez más, todo fue humo,
todo fueron mentiras.
La situación en abril de 2025 es que los muros han tenido que ser apuntalados para que no se vengan abajo, pese a lo cual hay riesgo para la ciudadanía.