El pleno del pasado lunes dio visto bueno al pago de tres facturas, que suman casi 40.500 euros, que estaban pendientes por algunas de las atracciones de las fiestas de Halloween del año pasado, ya que la contratación se había hecho de forma irregular.
Ha sido necesario lo que se denomina un reconocimiento extrajudicial de crédito tras levantarse el reparo que había puesto el
Interventor.
Este funcionario municipal considera que estas actividades se hicieron "mediante una
contratación verbal, prohibida por la legislación vigente".
Considera que el expediente "debió iniciarse en el momento oportuno y con la antelación suficiente".
No se hizo así y finalmente no dio tiempo a realizar las contrataciones, por lo que las atracciones se montaron sin ningún tipo de soporte documental.
Y es que, desde la Delegación de Fiestas, al frente de la cual está desde el pasado verano
Yolanda Marín, parecen haber adoptado las formas que ya hubo en la de Deportes durante etapa de
Manuel Cardeña.
En aquella época era habitual la contratación verbal de eventos deportivos, que después se pagaban, meses después, tras pasar por el Pleno.
Los informes jurídicos que acompañan el expediente al que ha tenido acceso
Marbella24horas señalan que "han de evitarse a toda costa situaciones como estas".
Pese a la reiteración de este mensaje, más allá de cambiar la forma de proceder el equipo de gobierno, vuelve a repetirse, ahora con la celebración de
Halloween.
Los contratos verbales fueron los de dos lotes de atracciones para
Marbella (17.857,27 euros + 15.500,10 euros) y una de
San Pedro Alcántara (7.046,53 euros).
En total,
40.403,90 euros, que fueron contratados de manera "irregular", según consta en los informes, sin fiscalización y de forma verbal.
Durante el pleno, la concejala
Yolanda Marín dio una explicación un tanto gilista a todo este asunto.
"Solo quedó pendiente la formalización de la adjudicación, una
formalidad, y la pregunta es ¿podemos suspender una fiesta querida y deseada por una formalidad?", dijo.
Desde el PSOE, el concejal
José Ignacio Macías señaló que "son tres contratos formalizados verbalmente a salto de mata y como si estuviésemos en
un mercadillo".
"Dudo que se haya elegido al mejor proveedor y con el presupuesto más ajustado, para eso está la contratación pública, no es una formalidad, es una garantía", añadió.
Daniel Mahíquez (OSP) recordó que este tipo de expedientes "se repiten porque ya vino otro de Navidad" y pidió al PP que "revisen su forma de gestionar, porque algo no funciona".
"No queremos que Fiestas sea la delegación de Deportes del mandato anterior", añadió.
Por parte de Vox,
Eugenio Moltó explicó que "no es una formalidad, es que se ha hecho un contrato verbal, la nulidad existe, otra cosa es que puedan levantar el reparo".
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