Pistolas eléctricas que paralizan, sin contacto físico, a un individuo peligroso. Este es el método que quiere poner el PP a disposición de la Policía Local de Marbella para evitar contagios durante sus intervenciones en plena pandemia mundial.
El equipo de gobierno puso en marcha hace tres semanas el procedimiento de urgencia para la compra de
15 pistolas tipo táser al considerar que los medios técnicos habituales son "insuficientes" en la situación actual.
Así se explica en un
decreto, al que ha tenido acceso
Marbella24horas, firmado el pasado 19 de abril por el teniente de alcalde
Félix Romero, en el que se explica que marca el virus es "altamente contagioso y de muy rápida propagación".
Llama la atención que una de las principales justificaciones para esta comprar es poder utilizar estas descargas eléctricas con
personas sin techo y/o
drogodependientes.
En ese documento se considera necesario que los agentes "extremen las condiciones de contacto con la población en general y muy especialmente con colectivos vulnerables que les hacen, como consecuencia de sus adicciones y estilos de vidas, blancos fáciles a la hora de contraer cualquier tipo de enfermedad y por tanto de contraer este virus".
"Muchos viven permanente en la calle y con la carencia de las más mínimas condiciones de higiene y sanidad", se añade en el decreto.
Según se explica, los policías locales "se encuentran en permanente contacto con estos colectivos con el consiguiente
riesgo de contagio que sufren los mismos".
A este contacto con los sintecho, hay que añadir las "demandas directas a través de la Sala de Mando y Control de la ciudadanía en general y las intervenciones directas de las patrullas en su servicio ordinario".
Para garantizar la seguridad de los agentes se propone la compra de 15 pistolas eléctricas, para reducir ,"con el menor perjuicio posible" y sin contacto con el agente, a las personas que desoigan las indicaciones y no respeten la distancia social.
El procedimiento administrativo se ha tramitado por urgencia y tendrá un coste para las arcas municipales de
43.669,69 euros.
No serán las primeras pistolas táser de la Policía Local de Marbella, ya que en octubre de 2018 el sindicato Sip-An reclamó adquirir más unidades, más allá de las dos existentes y que utilizaban el servicio de Prevención y al Grupo de Ayuda a la Familia (GAF).
Pidieron entonces también que estas armas las tuvieran los patrulleros.
Se trata de un tipo de pistola reclamada constantemente por los agentes, pero que está rodeada siempre de polémica ya que, aunque no es considera letal, puede ocasionar la muerte en algunos casos ya que realiza una
descarga de 50.000 voltios.
Contenido íntegro del decreto: