Con los votos a favor del Equipo de Gobierno del PP y la abstención de los grupos de la oposición, el pleno ha aprobado este viernes, de forma ya definitiva, la legalización de la casa de Antonio Banderas en Marbella, el chalé conocido como La Gaviota, que en su día fuera de Encarna Sánchez.
Este proceso para modificar el PGOU arrancó en octubre de 2010, cuando se realizó la aprobación inicial, que posteriormente fue provisional en abril de 2013. Ahora, con los últimos informes en regla, se da el visto bueno definitivo sin que se hayan producido alegaciones.
Como acordó el año pasado, el actor tendrá que ceder al municipio 1.243 metros cuadrados para que su vivienda quede dentro del ordenamiento urbanístico. Esta compensación se iba a realizar inicialmente en la zona sur, pero después se cambió a la parte lateral de la vivienda para que no afectara a la piscina.
Según explicó también en su día el Equipo de Gobierno, este asunto no tiene nada que ver con la cesión de terrenos que realizó el actor malagueño derribando una parte del muro de la casa para que pudiera construirse uno de los apoyos para la pasarela sobre el arroyo de Siete Revueltas con el fin de dar continuidad al paseo marítimo en todo el litoral del municipio.
En el debate que ha tenido lugar este viernes, el grupo municipal de Opción Sampedreña ha aprovechado para mostrar sus dudas precisamente sobre esa continuidad del paseo marítimo, que ven complicada ya que "habría que expropiar casas".
La concejala Gema Midón ha recordado que se ha gastado "casi un millón de euros en puentes suecos", uno de ellos el de arroyo Siete Revueltas, que "nunca lleva agua".
La alcaldesa, Ángeles Muñoz, respondió que "el paseo marítimo se va a hacer y es uno de los mejores atractivos de la ciudad". Sobre los puentes de madera sueca, en alusión a la nacionalidad de su marido, dijo que "ya me gustaría que la madera sueca tuviera algo que ver conmigo pero las empresas compran donde hay mejor calidad".
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