Muñoz ha vendido hoy a bombo y platillo un acuerdo que supone prolongar durante 20 años más, sobre el último plazo concedido, la devolución a la Junta del anticipo reintegrable entregado tras la operación Malaya.
Era una de las medidas, como avanzó
Marbella24horas el pasado
mes de septiembre, que estaba incluida en el
plan de ajuste presentado ante el Ministerio de Hacienda para conseguir un préstamo de 18 millones de euros a través del Fondo de Ordenación.
La Junta la incluyó en los
presupuestos para 2024 con la disposición final octava, por lo que entró en vigor el pasado 1 de enero, como también informó
este digital.
La nueva normativa contempla además que el interés baje hasta el 1% y que el Ayuntamiento pida una
carencia de tres años.
Se trata de un movimiento obligado por el citado plan de ajuste y necesario para poder
dar oxígeno a las arcas municipales.
Y es que al Fondo de Ordenación habrá que devolverle en total
58 millones de euros, ya que antes se habían solciitado otros 40 millones.
La deuda municipal se ha disparado en los últimos años y, especialmente esta con el
Ministerio de Hacienda, requiere de medidas para garantizar el pago.
Además de la renegociación con la Junta, también se va a
subir el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) para recaudar más dinero.
Muñoz, que ha contado hoy con la presencia de la consejera Economía y Hacienda,
Carolina España, ha presumido del acuerdo y lo ha justificado con mucha propaganda.
La regidora ha explicado que supondrá
un ahorro de casi 4 millones de euros para las arcas municipales en este mandato en lo que respecta a los intereses.
Pero la realidad es que, en vez de estar pagándolo como estaba previsto ahora hasta 2027, se tendrán que abonar otros 20 años más.
Historia del anticipo reintegrable
El 20 de octubre de 2006, con
Manuel Chaves como presidente de la Junta, se publicó la
Ley 5/2006, de 17 de octubre.
En ella, se concedía al municipio de Marbella un anticipo extraordinario de tesorería de
cien millones de euros.
El objetivo era garantizar la supervivencia del Ayuntamiento, que unos meses antes, en abril, había sido disuelto por corrupción tras la
operación Malaya y estaba en manos de una Gestora.
Entonces se estableció un plazo de
10 años para devolver ese dinero, que concluía en 2017.
Con la llegada al Ayuntamiento del equipo de gobierno tripartito en 2015, se volvió a
negociar con la Junta para relajar la amortización de los últimos años, que era muy costosa.
A través de los presupuestos para 2016, en su disposición final séptima, se modificó la ley de 2006 y se amplió la devolución
otros diez años, hasta 2027.
Ahora, a través de los presupuestos para 2024, se ha ampliado en veinte años más, hasta 2047.
Planes de ajuste
En 2021, el Ayuntamiento tuvo que aprobar
un plan de ajuste en el que se incluía una carencia de dos años (2022 y 2023) en la devolución del anticipo reintegrable a la Junta.
De esta forma, la cantidad que sigue pendiente son
41 millones de euros, que se empezará a pagar dentro de tres años, tras la nueva carencia.
Hay que recordar que el Ayuntamiento ha tenido que pedir
dos créditos al Fondo de Ordenación del Estado, uno de 40 millones de euros y ahora otro de 18 millones de euros.
El motivo es la necesidad de pagar sentencias judiciales adversas que no habían sido previstas por el equipo de gobierno.