El segundo intento por parte de la alcaldesa,
Ángeles Muñoz, de adquirir la parte de este edificio que no es municipal continúa adelante y se siguen dando pasos.
El expediente fue sometido el
pasado verano a exposición pública y se resolvieron las alegaciones presentadas, entre ellas las del PSOE, que fueron rechazadas.
Ahora, este martes, la Junta de Gobierno ha aprobado el
informe de valoración realizado por el área de Patrimonio del resto del inmueble, que es de
5.165.000 millones de euros.
El pago se plantea en
cinco anualidades por importes de 1.721.000 euros, 1.205.000 euros, 1.033.000 euros, y dos de 860.000 euros, según ha explicado el portavoz municipal, Félix Romero.
Esta información se traslada ahora a la sociedad
Nuevos Aires 2022 S.L. y, si la acepta, se realizará el acuerdo para la adquisición.
Si hay discrepancias sobre el justiprecio y los plazos, el asunto se judicializará y el proceso se alargará.
Segundo intento
Es la segunda vez que Ángeles Muñoz intenta hacerse con una parte de un inmueble que está vinculado a
Juan Hoffmann, condenado en el caso Malaya y prófugo de la justicia, y al alcalde de Estepona,
José María García Urbano.
La primera, conocida a
finales de 2018, con el apoyo de OSP, pero acabó
dando marcha atrás por la cercanía de las elecciones municipales y el escándalo que se originó.
Ahora ha vuelto a la carga, el pasado verano, con toda la intención de llevar adelante la compra sin que nada ni nadie la frene.
Es un edificio fácilmente reconocible, situado en la calle Alonso de Bazán, esquina con Notario Luis Oliver, en el centro de Marbella, y que actualmente alberga las dependencias de la
Delegación de Urbanismo.
Estas oficinas ocupan
tres plantas, que fueron entregadas al Ayuntamiento en función de las normalizaciones urbanísticas que estipulaba el anulado Plan General de Ordenación Urbana de 2010, ya que el inmueble se construyó de forma ilegal.
El resto pertenece a la empresa Nuevos Aires 2002 S.L., vinculada a Juan Hoffmann y a José María García Urbano, como recordó el PSOE el pasado mes de agosto.
En 2018, se pretendía pagar
2,8 millones de euros por el resto del inmueble, mientras que ahora la cantidad ha subido hasta los 5,1 millones.
El Ayuntamiento ni siquiera se hará con todo el edificio ya que ha acordado, estimando las alegaciones de dos empresas, entre ellas Nuevos Aires 2002, renunciar por estar sujetos a un contrato de arrendamiento al local comercial número 1 y a doce plazas de aparcamiento.
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