El marbellí Maté se mete en la fuga en la cuarta etapa de la Vuelta

Cuarta etapa de la ronda española, de 191,7 kilómetros, en la que se prevía una llegada masiva, como finalmente ha ocurrido. 

De salida hubo cuatro valientes que atacaron, entre ellos el marbellí Luis Ángel Maté (Cofidis), que se marchó acompañado por Jesús Ezquerra (Burgos BH), Willie Smit (Burgos BH) y Harry Tanfield (AG2R La Mondiale).

Su intento era casi imposible, en una etapa llana en la que los equipos con llegadores no iban a permitir que la fuga se presentara en meta. 

Llegaron a tener 4 minutos de ventaja, pero fue en los primeros 12 kilómetros, ya que, una vez se organizaron detrás, la ventaja nunca pasó de los 3 minutos.

La presencia del viento no originó cortes en el pelotón y los cuatro escapados fueron resistieron, llegaron a quedarse a 20 segundos. 

Luego volvieron a llevar su ventaja por encima del minuto y lograron llegar hasta el Sprint Intermedio de Sádaba con 30 segundos de ventaja.

Poco después de ese paso, en el kilómetro 169 de la etapa, fueron ya absorbidos por el pelotón Maté y Ezquerra. 

Después se reintegró al gran grupo Tanfiel y el que más aguantó fue Smit, cazado a 15 kilómetros para meta. 

A partir de ahí se preparó ya el esprint, donde el ganador en Ejea de los Caballeros fue el irlandés Sam Bennett (Quick Step).

Tras la etapa, Maté se ha mostrado satisfecho. "No me costó demasiado esfuerzo coger la fuga. Hoy se formó muy fácil. Enseguida vi que no íbamos a ningún sitio, así que intenté guardar el máximo", ha dicho.

"La etapa iba a ser muy nerviosa por el viento y he preferido ir por delante en casa de que se cortase. Habrá otras oportunidades", ha concluido el marbellí.