Parece evidente que este dispendio de dinero público no se corresponde con el interés que ha despertado la carrera, que es todavía menor al del año pasado pese a que volverá a ser también el Campeonato de Andalucía de la distancia.
Las cifras son elocuentes. La organización de la carrera se ha externalizado a través de un contrato con la Federación Andaluza, que cobra
138.337 euros por cada una de las dos ediciones que se han firmado, la del año pasado y la del actual.
A ello hay que añadir los
4.500 euros que se lleva
Martín Fiz como imagen de la prueba, asesor y también como liebre, y que el año pasado no pudo correr por el accidente que sufrió unos días antes.
En total, cerca de 150.000 euros para una carrera en la que se han inscrito solo
1.249 atletas, según la cifra oficial que se puede consultar en la página web de la Media Maratón.
Son
180 menos que el año pasado, cuando formalización su inscripción 1.429, también según oficial.
Por tanto, estamos ante la cifra más baja de los últimos años, en una prueba que el equipo de gobierno de Ángeles Muñoz está llevando a sus peores momentos.
Hay que recordar que en 2015 se alcanzó el récord de 2.500 participantes, cifra que fue bajando en las siguientes ediciones (1.800, 1.600 y 1.400) para tocar fondo ahora.
Hay que recordar que en el 2017 se midió mal el circuito y que en 2018 se optó por la
edición nocturna, que fue todo un fiasco tanto en el plano deportivo como en el organizativo.
Y es que el centro de Marbella se convirtió en un
auténtico caos, con largas colas de vehículos y, sobre todo, el desconcierto de no saber qué hacer, con la ciudad dividida en dos partes, norte y sur, sin comunicación entre ellas.
Se cortó al tráfico durante más de tres horas el eje principal de la ciudad, desde la rotonda de los barcos hasta el hotel Puente Romano, haciendo imposible acceder en coche a la zona, con lugares tan frecuentados como el Puerto Deportivo.
Este año, el recorrido es el mismo, con lo cual se repetirá el mismo caos que generó gran indignación entre muchos vecinos. La prueba partirá a las
19:30 horas desde el bulevar Alfondo de Hohenlohe.
Quejas por el adelanto de las salidas
A todo ello hay que añadir que este año, a última hora, se ha decidido adelantar quince minutos la salida de las dos carreras, la Media Maratón y la de 10 kilómetros, que arrancará finalmente a las 19:15 y 20:45 horas, respectivamente, lo que ha motivado muchas quejas de atletas.
En definitiva, que todo apunta a un nuevo desastre con este prueba, de gran solera, ya en su 34ª edición, pero que está tocando fondo por la mala gestión política.
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