El taekwondo es un auténtico valor seguro para el deporte español en cualquier campeonato, pero más aún en los juegos olímpicos, donde siempre aporta medallas.
Gran parte de la culpa de los logros de los últimos años, y de los que están por venir, es de la
sampedreña Elena Benítez.
En Tokio vivirá sus
octavos juegos olímpicos. Ha estado en tres como deportista (Seúl 88, Barcelona 92 y Sidney 2000) y en cuatro como entrenadora o directora técnica: Atenas 2004, Pekín 2008, Londres 2012 y Río de Janeiro 2016. Ahora añade Tokio 2020.
Llegó a la capital japonesa el pasado domingo
al frente de la expedición que forman los cuatro deportistas y dos entrenadores.
"Es un privilegio estar aquí", ha señalado a
Marbella24horas, porque "aunque lleve ya tantos juegos siempre es un acontecimiento muy especial", añade.
De los siete miembros del equipo español, Elena Benítez es la
única con experiencia en esta competición. "Intentaré hacerles de cicerone", señala.
Tras la inauguración del viernes 23, el taekwondo es uno de los
primeros deportes en echar a andar, entre los días 24 y 27 de julio.
Raul Martínez, Adriana Cerezo, Javier Pérez Polo y Adrián Vicente son los cuatro taekwondistas elegidos. "Están finos, motivados y anímicamente muy bien", señala la directora técnica.
Benítez es muy optimista porque "han hecho muy buen trabajo" de preparación y considera que
los cuatro tienen opción de medalla. "Luego en la competición puede pasar de todo", asegura.
"Es el momento de recoger el trabajo de cinco años, tenemos confianza en los deportistas y en los técnicos, mi labor ha sido
darles todos los medios posibles para que lleguen con los deberes hechos", señala.
Los tres chicos tendrán la dificultad añadida de enfrentarse en el segundo combate a los números 1 del ránking mundial en sus pesos, aunque en caso de derrota tienen la opción de repesca.
Todos los miembros de la expedición están
vacunados contra la Covid-19 y han tenido que pasar varias pruebas PCR. Competirán sin público, aunque ya están acostumbrados por las últimas competiciones disputadas así.
Elena Benítez recuerda con especial cariño su presencia en los
Juegos Olímpicos de Barcelona 92, en los que logró la medalla de oro, y como entrenadora los que se celebraron en Londres 2012.
También destaca la figura de los voluntarios, que le dejaron huella en
Barcelona y Sidney, y que realizan "siempre una labor muy importante".
En Tokio serán unos juegos distintos, porque se celebran por ejemplo un año después por la pandemia, pero al final "la Villa Olímpica es como siempre, aunque en este caso sin gente de fuera".
Los taekwondistas españoles apuran estos días los
últimos entrenamientos antes de competir, bajo la atenta mirada de Elena Benítez. La suerte está echada y los días 24, 25 y 26 tendrán los resultados.
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