- Ahora que podemos echar la vista atrás, ¿cuál es el balance de esta temporada?
- Muy positivo. La temporada es muy larga y da para mucho. Hay momentos mejores y otros no tan buenos, pero el balance es muy positivo. Creo que lo he hecho mejor que el año pasado, que es para lo que se trabaja. Y los resultados han sido mejores y he conseguido mucha regularidad y rendir a buen nivel todas las carreras. Esto me motiva para seguir.
- Dices que eres mejor ciclista, ¿en qué crees que has progresado?
- Hay un año más de trabajo y ese es el principal cambio. Creo que si uno trabaja una semana, recoge el fruto de esa semana. Si trabajas un año, recoges el fruto de ese año. Al final, el objetivo de un deportista es mantener una progresión cada temporada. Y con otra temporada más en las piernas soy más fuerte físicamente.
- ¿Sería lógico, pues, que en 2015 mantuvieras esta progresión?
- Lógico no sé, pero desde luego que es el objetivo. Para eso se trabaja cada año y sé que aún tengo margen para mejorar.
- ¿Con qué momento, o qué carrera, te quedas de esta temporada?
- Pues es complicado. Si tuviera que quedarme con alguna, el GP Plumelec. Me vi muy fuerte y terminé segundo después de un gran día. Y en la etapa de los Lagos, en la Vuelta, también me encontré genial.
- ¿Y la peor?
- Pues probablemente, los días que estuve enfermo en el Tour de Francia. Sufrí mucho al ser un problema respiratorio. Me impedía estar en el mejor nivel.
- Hablando de las grandes vueltas. Está claro que son sólo números, pero estar en el Top 20 de una Gran Vuelta es algo difícil de conseguir y, sobre todo, de repetir. ¿Crees que es factible volver a verte ahí?
- Como dices, son sólo números. Prefiero acabar el 50º y ganar una etapa que acabar el 19º. Veremos cómo se desarrollan las grandes vueltas. Pero también es cierto que esos números demuestran que uno está ahí, y que el trabajo ha sido bueno. Eso es lo que hay detrás de los resultados y es lo que a un ciclista le da confianza para mantener la ilusión.
- Has terminado arriba del Tour y, sobre todo, en la Vuelta. Pero se te ha visto menos en solitario. ¿Hay un cambio en la forma de correr, o son exigencias del guión?
- Son circunstancias de carrera. Yo me debo a un equipo y tengo que acatar las órdenes que me manden, cosa que además hago con gusto. En el Tour hubo días que se me pidió coger la fuga y ahí estuve. En la Vuelta, como teníamos los objetivos al alcance, me ordenaron acompañar a Dani Navarro hasta el final en la montaña, y eso hice. Para mí es importante y bueno saber que puedo hacer tanto una cosa como la otra.
- ¿Y qué te gusta más?
- Siempre he sido un corredor ofensivo. Me gusta correr al ataque, pero al final el ciclista se debe a un equipo.
Luis Ángel Maté en el podio del Tour de Francia al recibir el premio a la combatividad.
- Cuando fichaste por Cofidis era difícil pensar que acabases arriba en las grandes vueltas. ¿Te han dicho algo desde el equipo por tu rendimiento? ¿Les ha sorprendido?
- La carrera de un deportista va evolucionando, ese es el sentido de la trayectoria de un profesional. Avanzar y progresar cada año. Desde el equipo obviamente están contentos con verme tan delante, incluso aunque haya faltado rematar. Pero sorpresa no. Hoy día el ciclismo está muy medido, y las cosas no vienen por sorpresa sino por trabajo.
- Ahora toca descansar. ¿Le vas echando ya el ojo a 2015?
- Sí, claro. El descanso es el primer paso fundamental para hacer una buena temporada el año que viene. Así que, por supuesto, ya estoy pensando en el nuevo año. Ahora, eso sí, lo principal es descansar bien, asimilar todos los esfuerzos y poder empezar a hacer una buena base.
- ¿Qué tienes en la cabeza?
- De calendario aún es pronto. Hasta que no nos reunamos no se sabrá. Me gustaría correr el Giro, aunque no sé si el equipo irá el año que viene. Y también llegar a la Vuelta a Andalucía bien, que es la carrera de casa. Pero aún no sé cuándo empezaré, así que la principal motivación es currar día a día. No se puede fiar una temporada a una carrera, hay que rendir bien y eso sólo se consigue con muchas horas de buen entrenamiento.
-Hablando del Giro, se acaba de presentar su recorrido. ¿Qué te parece?
-Me gusta, me gusta bastante. Tiene esa crono larga, pero complicada. Obviamente mientras más duro sea mejor me viene, y esas etapas de montaña en la tercera semana me favorecen. Ya veremos, ojalá el equipo pueda ir porque me motiva hacerlo.
- ¿Tienes ya programada la vuelta a los entrenamientos?
- Sí, estaré parado todo octubre. Empiezo a principios de noviembre, poquito a poco, metiendo bici desde el principio. Luego a finales de mes o primeros de diciembre haremos dos concentraciones, y ahí nos irán dando algo de calendario. Y puede que haga también algo en altura este invierno.
- Hablemos del equipo. Has sido capitán de ruta, y ya llevas cuatro años en Cofidis, algo que en ciclismo no es fácil. ¿Qué crees que aportas al equipo para que tengas esa función?
- Pues no lo sé. Creo que soy una persona abierta, dialogante…
- ¿De las que hacen vestuario?
- Pues… creo que sí (risas). Sobre todo, alegre. Pero eso te lo podrán decir los demás, yo sólo trato de ser yo mismo. Al final estás rodeado de un grupo de persona con las que convives, pasas mucho tiempo. Intento crear un buen ambiente y que rememos todos en la misma dirección. El equipo Cofidis lo siento como algo mío, es bueno lo de "sentir los colores".
- Falta la recta final, pero ya se puede ir haciendo un balance de la campaña del equipo. Este año son de similar número, pero de otra calidad…
- Sí, creo que es más importante analizar eso: la calidad de los triunfos. Esperemos redondear con alguna otra carrera, pero sobre todo la etapa de Dani en la Vuelta, la Copa de Francia… y creo que también es importante el comportamiento que hemos tenido. Ha sido generalmente mejor, y ha habido gente joven a la que se les ha visto destellos. No ha sido una temporada perfecta, pero hay motivos para estar contentos y pensar en el futuro con optimismo.
- Para el año que viene llega Bouhanni con gente de confianza. ¿Qué opinión te merece esta apuesta tan en serio?
- Creo que será muy positivo. Tanto él como su grupo nos van a aportar mucho. Es uno de los mejores sprinters del pelotón y esperemos que sume un buen número de victorias. Por mi parte es más que bienvenido.
- ¿Es el ‘killer’ que le faltaba al equipo?
- Sí. Creo que cualquier equipo del mundo quisiera tener a alguien como él. Joven, con margen, ganas de mejorar, hambre y que ya ha ganado en el Giro y en la Vuelta. Será un lujo tenerlo.
- Y ahora, la parte que te afecta a ti. ¿En qué posición quedáis hombres más dados a la escalada como tú o Dani?
- Pues habrá que verlo. Dependerá, como es obvio, de la forma de correr que desarrolle el equipo. Pero trataremos de coger nuestro hueco.
- Si el equipo se centra en él, o en el sprint, ¿adoptaréis un rol más de hombres libres?
- Pues puede que sí, o puede que no. Igual nos toca tirar de salida. Ya veremos qué tal encajamos. Pero en cualquier caso es un reto personal ver qué se puede aportar a cada esquema y cada forma de correr.
- Este año se ha visto en la Vuelta gran cantidad de público, y has dicho más de una vez que se trataba de una “confirmación”. ¿Sientes que la gente está más cerca de nuevo de los ciclistas?
- Por supuesto. Si el ciclismo es algo, es sólo gracias a ellos. Me llega muchísimo apoyo en las carreteras. La gente pinta mi nombre, viene a verme al autobús del equipo. Me escribe por las redes sociales, y es impresionante. Somos unos privilegiados por tener tanto cariño gratuito. Se lo debemos absolutamente todo a ellos.
- Para acabar, también ha terminado el primer año de tu Academia. ¿Qué conclusiones sacas de esta primera temporada?
- Muy positivas. Lo más difícil de estos proyectos es echarlos a andar. Tanto para mí como para la gente que llevaba la Academia era algo totalmente nuevo. Ya estamos ahí, y toca consolidarlo. Además los resultados han llegado, que no era lo más importante, pero también motiva. Así que muy contento y con muchas ganas de mejorar y seguir creciendo.