El grupo empresarial francés ha celebrado su convención anual de inversores, que ha contado con la presencia de su presidente, Henri Giscard d’Estaing, y de la alcaldesa de Marbella, Ángeles Muñoz.
En este encuentro ha tenido un lugar destacado el proyecto para Marbella, con una inversión que rondará los 70 millones de euros y que prevé la creación de 300 puestos de trabajos durante la fase de construcción y otros 300 empleos permanentes cuando el complejo se encuentre operando.
La demolición parcial del antiguo hotel constituye el arranque de las obras de ejecución para la reconstrucción y apertura del nuevo establecimiento, prevista para la primavera de 2019.
Los trabajos de derribo comenzarán el próximo mes de febrero y se prevé que las obras de construcción se inicien en abril de 2018, según el comunicado enviado por el Ayuntamiento.
El hotel contará con 486 habitaciones, en torno al millar de camas turísticas, y que espera atraer entre 300.000 y 400.000 clientes al año a un complejo que estará destinando especialmente al turismo familiar.
Durante la convención, Muñoz mantuvo una reunión con el presidente del grupo francés, así como con los representantes de la cadena encargados de desarrollar la iniciativa hotelera en Marbella, que dieron cuenta de los pormenores de un proyecto que constituye el regreso del Club Med a España.
La licencia de obras concedida por el Ayuntamiento da el visto bueno al inicio del proyecto de demolición parcial del hotel, que incluye varias edificaciones, con la advertencia de que en la parcela existen ejemplares arbóreos de gran porte y que deberán tomarse las medidas necesarias por parte de la empresa durante la ejecución de las obras de demolición para su protección.
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