Aquí te dejamos algunas de las mejores propuestas para sacarle partido a tu tiempo libre en Málaga:
Visitar el centro histórico y recorrer el Muelle Uno
Málaga tiene un casco histórico que no decepciona:
Calle Larios, la Catedral, la Alcazaba o el Teatro Romano, y los Musos Thyssen, Picasso o el Museo de Málaga son solo algunas de las paradas obligatorias si te apetece una tarde de paseos tranquilos con un toque cultural.
Y lo mejor es que todo está cerquita, lo cual permite improvisar sin problema. Puedes entrar a ver una exposición, hacer una parada para un helado artesanal o sentarte en alguna terraza a disfrutar de unas tapas con vistas.
Después, lo ideal es dirigirse al Muelle Uno, recorriendo el Palmeral de las Sorpresas hasta llegar al paseo al borde del puerto que tiene ese rollito moderno con toques marineros que lo hace ideal para desconectar sin necesidad de irse muy lejos.
El paseo está lleno de
tiendecitas, restaurantes con vistas al mar, terrazas donde parar a tomar algo, y también arte gracias a la presencia del
Centre Pompidou Málaga.
Además, si vas con niños, debes saber que en Navidad y en verano suele haber atracciones especialmente pensadas para ellos; y, fuera de estas épocas, pueden divertirse en la
bolera- arcade Galaxy Park durante todo el año.
Prison Island: mucho más que un escape room
Ahora bien, si de verdad queréis hacer
algo diferente, divertido y con un punto de competición sana, lo vuestro es Prison Island. ¿Qué tiene de especial? Que no es el típico
escape room en Málaga.
A diferencia de otros escape rooms, en Prison Island no hay una sola sala con un solo enigma, sino un
conjunto de celdas, cada una con su propio reto.
Puedes entrar en grupo, repartiros y resolver desafíos físicos, lógicos o de habilidad, y sumar puntos en cada celda que superéis.
Lo bueno es que no necesitas ser ningún atleta ni un genio para pasarlo bien: se trata de
colaborar, reírse y probar cosas nuevas sin presión.
Y lo mejor es que podéis repetir la experiencia cuantas veces queráis porque siempre hay algo distinto por descubrir.
La sala de laser tag que convierte la diversión en batalla
Dentro del mismo espacio de Prison Island, tienes otra propuesta que pone el listón aún más alto: su sala de
laser tag en Málaga. Si te van las emociones fuertes y los juegos de estrategia, esto te va a flipar.
Es una
batalla de láser donde el objetivo es moverse rápido, esconderse, disparar con puntería y pasarlo genial. La sala está ambientada con luces, humo y sonido envolvente para que te metas de lleno en la experiencia.
Ya sea con amigos competitivos o con familia con ganas de pasarlo en grande, esta actividad os garantiza
momentos para recordar y muchas risas comentando las jugadas después.
Y sí, es una forma bastante original de pasar la tarde, sobre todo si buscáis algo fuera de lo común.
Un día de playa con parada en El Tintero
Ir a Málaga y no visitar el epicentro del
pescaíto frito y los espetos es casi un deligo. En el barrio malagueño de El Palo, situado en el extremo Este de la ciudad, se encuentra uno de los chiringuitos más famosos de la capital:
El Tintero, caracterizado por su curioso sistema de subasta de platos de pescado.
Aquí no hay carta: los camareros se pasean con bandejas cargadas de lo que va saliendo de la cocina y de las brasas, y
los comensales van eligiendo sobre la marcha cuáles son los platos que quieren degustar.
Al finalizar el festín, solo queda pagar a alguno de los trabajadores especializados en este trámite (y a los que reconocerás fácilmente porque se pasean entre las mesas declamando a voz en grito: "Y yo, ¡cobro!"), que se encargará de pasar factura contando el número y tipo de platos elegidos que han quedado sobre el mantel.
Tanto antes como después de la comida, y si el tiempo acompaña -lo que suele ocurrir casi todo el año-, puedes disfrutar de un
relajante baño en la Playa de El Dedo, en la cual se sitúa el chiringuito.
Puesta de sol desde Gibralfaro: el broche de oro al día
Si buscas acabar el día con un momentazo o te apetece despejarte del casco urbano y entrar en contacto con la naturaleza, tu mejor opción es recorrer alguno de los
senderos del Monte de Gibralfaro, donde se encuentra el castillo que le da nombre (y que se puede visitar).
Accesible tanto en coche como andando desde el mismo centro de Málaga, puedes terminar el paseo en su
espectacular mirador: desde allí se ve toda Málaga iluminándose poco a poco mientras el sol se despide en el horizonte.
Es uno de esos lugares que transmite paz, y donde da gusto parar un rato a contemplar la ciudad desde las alturas.