España cerró este domingo un fin de semana perfecto al imponerse a Hungría por 3-0 (21-16, 21-14 y 21-10) y gana enteros para conseguir meterse en la Final Four si repite juego y resultados en la cuarta jornada de la Liga Europea que se celebra en Opava (República Checa).
El conjunto del sampedreño Ángel Trinidad fue muy superior en el oartudo ante los húngaros y aunque en el primer set necesitó unos puntos para meterse en el encuentro, a medida que entraba en el partido, la fluidez de los españoles les permitió cerrar el primer set por 21-16.
Las dudas de España en el arranque del partido habían quedado disipadas con rapidez, y la selección mantuvo el ritmo del último tramo del set inicial para controlar el segundo parcial. El combinado nacional fue poco a poco controlando la situación, apoyado en el trabajo defensivo y el acierto en ataque de Gustavo Delgado. La renta española se afianzó en el marcador tras el tiempo técnico, y el acierto de los pupilos de Fernando Muñoz acercó el set a su desenlace con un claro 14-21.
La selección española no quería complicarse un partido que tenía encarrilado, y dos bloqueos consecutivos de Miquel Angel Fornés y el saque de Marc Altayó abrieron las primeras diferencias. El parcial 1-6 obligaba a Hungría a realizar un ímprobo esfuerzo que la serenidad del juego español controló, administrando la renta recién obtenida. Fernando Muñoz aprovechaba el dominio nacional para dar entrada a Daniel Rocamora y Gerard Osorio, que ha disfrutado en Montenegro de su debut como internacional, y continuar ampliando la ventaja hasta el definitivo 10-21.
El colocador de la selección nacional, Ángel Trinidad, valoraba el desarrollo del choque que España venció ante Hungría. "El equipo ha empezado un poco falto de ritmo, pero con un par de buenas acciones en saque, y nuestro trabajo en bloqueo y defensa hemos impuesto nuestro ritmo".
El sampedreño hacía balance de un gran fin de semana de competición indicando que "sacar nueve puntos en este fin de semana según habían ido los otros, la verdad es que es bastante positivo y nos da mucha confianza para el próximo fin de semana". Donde España se jugará el pase a la final en territorio checo.
Para conseguir el pleno de victorias este fin de semana, el conjunto español tuvo que superar también a Montenegro al que derrotó por 3-1 (21-19, 24-22, 18-21 y 21-19) y República Checa al que también se impuso por idéntico resultado 1-3 (30-28, 11-21, 17-21 y 19-21).
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