La igualdad marcó el inicio del partido. El intercambio de puntos fue la constante en una primera manga en la que las diferencias se mantuvieron al mínimo y ningún equipo fue capaz de encadenar dos acciones positivas seguidas. Los ataques liderados por Andrés Villena en el bando español eran rápidamente respondidos por el conjunto húngaro, con Roland Gergye como principal estilete. Así, con empate se llegó a la fase decisiva del parcial, ninguna escuadra cedió y el set se eternizó. Hungría se ayudó de una controvertida decisión arbitral para sumar la efímera ventaja que le permitió llevarse el set 24-22.
Esta derrota parcial tan ajustada influyó en el ánimo momentáneo de los españoles, que vieron cómo se encontraban a la salida del segundo set con un 5-1 en contra. Sin embargo, y pese a la dificultad que implica ir a contracorriente con este nuevo sistema de puntuación, los nacionales protagonizaron una sensacional reacción, certificada en la variedad del juego que impuso Ángel Trinidad y en la efectividad de los ataques de Andrés Villena, así como la aportación de Sergio Noda, Gustavo Delgado y Jorge Fernández.
Los pupilos de Fernando Muñoz firmaron una extraordinaria segunda parte de parcial y tras el tiempo técnico arrollaron a sus rivales. El tesón de los nacionales hizo posible que España pasase del 11-12 al 14-21, una gran demostración de fuerza para ganar el set y devolver el empate al partido.
Con un set en cada casillero, la igualdad regresó al partido. Los ataques se imponían a los bloqueos y ninguna de las dos escuadras era capaz de mandar en el juego (12-11). No obstante, a medida que transcurría la tercera manga, la actuación sin fisuras de los españoles fue abriendo brecha en el set. Hungría se veía incapaz de contrarrestar el acierto ofensivo de los nacionales, que ya sea por las bandas o por el centro, encontraban maneras de llevar el balón hacia el suelo contrario.
Así, haciendo de la firmeza su mejor arma, España logró una ventaja de +3 que terminaría siendo decisiva. Un gran remate del capitán Sergio Noda puso el 17-21 que adelantaba a España.
El juego firme y la variedad ofensiva del conjunto que entrena Fernando Muñoz terminaron por desquiciar a Hungría. Los errores comenzaron a determinar el juego magiar, unos fallos que se produjeron a consecuencia del gran juego colectivo español. Los nacionales perpetuaron su eficacia y sacaron provecho de su acierto en defensa y bloqueo para terminar por romper el set después del tiempo técnico.
Con una ventaja de +6, y con un nuevo debutante, Miquel Ángel Fornés, en pista, los nacionales fueron capaces de mantener su buen rendimiento para así culminar su triunfo en el set. Un sensacional saque directo de Fran Ruiz supuso el 16-21 que ponía el definitivo 1-3.
La selección masculina por tanto consigue su primer triunfo en la Liga Europea 2013, una trabajada victoria tremendamente significativa para el joven equipo nacional. España cerrará la primera jornada de la Liga Europea 2013 el lunes, a las 15:30 horas, contra Montenegro (en directo por laola.tv).
Ficha técnica:
Hungría: Bagics (7 ), Nagy (3 ), Gergye ( 9), Kovacs ( 5), Kaszap (1 ), Baroti (17 ) (seis inicial) Domotor (líbero) También jugaron: Szabo (0), Nemeth (4), Nacsa (4)
España: Noda (12 ), Trinidad (4 ), Altayó (6 ), Delgado ( 11), Fernández ( 7), Villena (13 ) (seis inicial) Llabrés (líbero) También jugaron: Ruiz (1), Fornés (1)
Parciales: 24-22 (23 ). 14-21 (17), 17-21 ( 21), 16-21 (20)
Árbitros: Bensimon, R (ISR) – Piasetski, A (BLR)
Observaciones: Segundo partido de la primera jornada de la Liga Europea de Voleibol 2013, que se disputó en el pabellón Messzi Istvan Sportcsarnok de la localidad húngara de Kecksemet.
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